lunes, 6 de abril de 2015

Reseña: Akatsuki no Yona (o cómo dar un empujón a la fantasía romántica)

Akatsuki no Yona

(o cómo dar un empujón a la fantasía romántica) 


Hacía mucho tiempo que no veía algún anime nuevo. La pereza me podía (y también un trabajo temporal en Irlanda, salir al campo a pajarear, jugar al League of Legends o petar Youtube con vídeos chorras), pero mi amiga Anna (draperdi, en su canal de Youtube) me recomendó encarecidamente que viera Akatsuki no Yona

No solo lo empecé a ver, sino que cuando estaba a punto de terminar me fulminé el manga entero. Sin comerlo ni beberlo, Akatsuki no Yona se ha hecho con uno de los primeros puestos en mi lista de animes (y mangas) favoritos de todos los tiempos. La leche. Tiene todos mis elementos predilectos en un manga: fantasía, sentido del humor, personajes fascinantes y algunos tintes de drama y romance. 

Un anime de 24 episodios, basado en el manga aún en marcha (17 tomos) de la autora Mizuho Kusanagi, y del que no se sabe si habrá continuación. Serie soberbia, pero que merece ser continuada. 

Aquí la recomendación + reseña (con spoilers del anime) que hice para el canal de Youtube: 


Y ahora vamos con el "destripe" escrito, que seguramente será incluso más extenso y coherente que en vídeo. 

ARGUMENTO


En realidad, te puedes ver el opening (ya sea el 1 o el 2), que te hacen un resumen bastante claro del argumento. 

Yona es la única hija del rey Il, gobernante del reino de Kouka (un país inspirado en Japón/China feudales). Dicho monarca es pacifista en exceso, hasta el punto de que rechaza totalmente la toma de armas y pacta con cualquiera para evitar conflictos entre naciones. La princesa Yona tiene casi dieciséis años, ninguna preocupación en la vida y un cabello característicamente rojo (bueno... en el anime es más bien carmín, pero viene a ser lo mismo) del que siempre se está quejando. Una de las personas que viven a su lado en el castillo Hiryuu es Son Hak, el joven General de la Tribu del Viento y su guardaespaldas personal. En honor a su dieciséis cumpleaños, Yona espera con ansias la visita de su primo Soo-Won, el hijo de su fallecido tío paterno, del que ha estado enamorada desde pequeña (nota a que las relaciones entre primos nunca han sido raras en la época medieval, en especial entre la nobleza). 

Todo parece ir maravillosamente para Yona hasta que la noche misma de su dieciséis aniversario alguien muy cercano a ella asesina a su padre, el rey Il, frente a sus ojos. Dicha persona pretende silenciarla por lo que ha visto, pero su guardaespaldas Hak aparece para salvar el día (tío más bestia luchando no he visto en la vida). Con ciertas dificultades y alguna que otra pérdida, Yona consigue escabullirse del castillo junto a Hak y emprenden una desesperada huida al ser el chico acusado del asesinato del rey. Su primera parada es la Tribu del Viento, de donde es originario Hak, pero pronto no se trata de un lugar seguro al comprometer su presencia la seguridad de los aldeanos. Yona y Hak siguen huyendo, con sus perseguidores siempre pisándoles los talones. Tras una serie de acontecimientos, su camino se cruza con el de Ik-Soo, un monje capaz de escuchar la voz de los dioses que fue expulsado del castillo varios años atrás. 

Éste le habla sobre la leyenda de la fundación del reino: miles de años atrás, un dragón rojo juju bajó a la tierra en forma humana y se convirtió en Rey. Tras diversas guerras y gestas, la gente consiguió capturarlo e intentaron ejecutarle. Justo en el momento en el que iba a morir, aparecieron 4 dragones que lo impidieron, rogándole que regresara al cielo con ellos. Hiryuu dijo que ya era demasiado humano y que amaba a éstos, por lo que los dragones dieron a beber su sangre a 4 guerreros humanos, dotándoles de poderes sobrenaturales para que protegieran al rey Hiryuu. Desde entonces la sangre de los dragones ha ido pasando de generación en generación, por lo que en la actualidad hay 4 descendientes de dichos guerreros. Yona toma la decisión de ir a buscar a esas personas extraordinarias, ya que cree que puede pedirles su ayuda para restablecer la paz en el reino de Kouka. 

Ésta es la premisa básica que da el empujón definitivo a la trama. Yona emprende el viaje junto a Hak y Yoon, un inesperado e inteligente compañero, para buscar a los Dragones. Yona deberá lidiar con ellos, sus diferentes circunstancias y situaciones personales, para convencerlos de que se unan a su causa. En ése camino ella misma pretende dejar de ser la princesa mimada para convertirse en una líder que, arco en mano, es digna de seguir. Por otra parte se produce una serie de tramas políticas en el reino, que incluyen coacción, tráfico de influencias y lealtades dudosas que definirán el destino de Kouka. 


PERSONAJES

Los personajes, y muy especialmente la dinámica entre ellos, son el punto fuerte de esta historia. No tiene giros argumentales súper inesperados (o no muchos, al menos en el anime), pero sí personajes que amas sí o sí. 

Puede contener contiene SPOILERS!

Yona


Yona es sin duda la razón por la que este anime (y también el manga) no pase sin pena ni gloria. Porque las protagonistas de historias de esta temática a menudo se hacen pesadas, y a Yona sencillamente no puedes evitar quererla. 

Yona es la única hija del Rey Il, una princesa que a sus casi dieciséis años ha vivido sin ningún tipo de preocupación. Aunque su madre murió cuando era muy pequeña, su padre la ha cuidado y consentido desde siempre y no le ha faltado ni cariño ni caprichos. Su primo Soo-Won, hijo de su fallecido tío paterno, y su guardaespaldas Hak siempre han estado a su lado, añadiendo más compañía a su perfecta realidad. Rodeada de lujo y de sirvientes que la quieren, la vida de Yona era sencillamente perfecta... hasta que su padre es asesinado precisamente por el hombre al que ella amaba. Ya no hay espacio para la princesa débil a la que todos tienen que proteger, y tras un consecuente tiempo de luto, por su padre y por su propia vida, Yona se convierte en otra persona. 

Sin duda la gran evolución de Yona es uno de los pilares que llevan a cuestas esta historia, porque resulta creíble. No te plantan una Mary sue que de la noche a la mañana se convierte en una máquina de matar ni nada por el estilo, sino una chica que se daña las manos y pierde horas de sueño para, tras varios meses de práctica, aprender a utilizar un arco. Tampoco su actitud da un giro inverosímil, sino que incluso cuando empuña un arco siente miedo de matar a otros seres, aunque sean piezas de caza. Es una protagonista que sencillamente se hace querer, y es algo más difícil de lo que parece. A veces peca de ser demasiado inocente, pero sin llegar a resultar tonta. Tiene autodeterminación pero a veces se ve limitada por las circunstancias, algo totalmente entendible. Está dispuesta a conocer de primera mano cómo sufren sus súbditos, pues no puede ser una reina ignorante. Un amor, vamos.

Yona resulta tremendamente carismática para el resto de personajes con los que se va encontrando. Uno/a enseguida intuye su atadura con los Dragones (y su consecuente relación con el rey Hiryuu), pero también entiende que haya algunos personajes que la sigan por quién es y no por lo que es (como Yoon, Shin-Ah, Jae-Ha o el propio Hak). Sabe desnudar el corazón de la gente y llegar a empatizar con ellos, algo que otros no podrían hacer. A la cabeza vienen en el acto los encuentros con Shin-Ah o Jae-Ha, donde la perseverancia y comprensión de Yona, sabiendo exactamente cuán larga tener la cuerda con la que "los ata", consigue que al final se pongan de su lado. Aunque no sea una luchadora formidable ni excepcionalmente fuerte, sí tiene el potencial absoluto para convertirse en la líder que Kouka necesita. 

Previsiblemente existe trama amorosa para Yona, aunque es llevada con una frescura y naturalidad que, lejos de molestar, te hace poner carita de "oooh...!". Sin embargo debo decir que a veces me cabreaba que Yona siguiera tan empecinada con Soo-Won. Comprendo perfectamente que lleve tantos años enamorada de él que no pueda olvidarle de la noche a la mañana, pero también ha matado a su padre delante de sus narices. Que se lo encontrara en Awa y fuera incapaz de moverse fue un poco "¿en serio?", aunque ella misma se castiga mentalmente por esa razón. No obstante, sin duda la carga amorosa más importante (al menos de cara al espectador) es la que involucra a Yona y a Hak, aunque ella misma no parezca darse cuenta de ello.

lel...


Son Hak


Hak es, al principio de la historia, uno de los cinco Generales que protegen el reino de Kouka. En concreto es el General de la Tribu del Viento, heredero del legendario Mundok, y el guardaespaldas oficial de la princesa Yona por orden del rey Il. 

Hak ha vivido en el castillo Hiryuu durante gran parte de su vida, creciendo junto a Yona y su primo Soo-Won. Aunque técnicamente es un sirviente de Yona, la chica le trataba como a una especie de igual, teniéndole una confianza equiparable a la que dispensaba a su primo. Los tres jugaban, comían y dormían juntos. En una ocasión, Yona y Hak llegaron a fingir que eran prometidos para que la chica se librara de las pesadas atenciones del joven heredero de la Tribu del Fuego. Aunque Yona no sea consciente de ello, Hak ya desde su infancia desarrolló una fuerte atracción por la princesa que lo llevaba a buscar instintivamente su compañía.

Hak no tiene poderes mágicos, pero su estilo de luchar se equipara al de los Dragones. Con su lanza es capaz de lanzar ataques masivos a varios enemigos (¿al puro estilo ráfagas de aire?) que les ha salvado de algún que otro aprieto contra multitudes poco amigables. Para ello debe poseer una fuerza monstruosa, ya que la lanza en cuestión no es precisamente ligera. También es buen arquero, o al menos más que los otros personajes que usan "habitualmente" arco, que son Yona y Soo-Won. Además Hak tiene una fuerte tolerancia a las heridas y los golpes, ya que ha sufrido heridas que podrían ser mortales para otras personas y en cambio él se ha recuperado. "Un humano normal no hubiera sobrevivido", dicen de él.

Hak es el personaje más querido por los fans en Japón, algo que puedo entender perfectamente. La bondad del chico, su descaro y su tendencia a soltar indirectas "picantes" (y nunca sabes cuando va o no en serio) lo hacen muy carismático. Hak no es tan compasivo como Yona, pero sí sabe mostrar su lado más dulce y protector con algunos personajes como la propia princesa o su pequeño hermano adoptivo. A pesar de tratarse de un guerrero temible y de tomarse su debe de guardaespaldas al límite, es un personaje muy cómico. A menudo puede estar sucediendo algo muy serio y él está ignorando lo que pasa, o fingiendo despreocupación. También le gusta "chinchar" a Yona, molestándola por pequeños detalles que sabe que la sacan de quicio. Lo mismo hizo con Ki-Ja, con el que mantiene una fuerte rivalidad (especialmente en los primeros episodios). 

Hak lleva mucho tiempo prendado de Yona. Es algo que salta a la vista y que él mismo alienta dejando caer comentario ambiguos. Hak parece frustrado porque Yona no se dé cuenta de sus obvios sentimientos, pero a la vez parece considerar que su deber está por encima de sus propios deseos y no se ve capaz de cruzar la línea que separa sirviente de señora. Al mismo tiempo, se encuentra en la encrucijada de querer protegerla de todo mal y, al mismo tiempo, ansiar verla convertirse en la digna gobernante que el país merece. Hak a veces se ve arrollado por el temple de Yona, enamorándose a cada instante más y más de la chica en la que se está convirtiendo. Eso hace que su relación con Soo-Won, el último del trío, sea todavía más ambivalente.


Soo-Won


Soo-Won es el hijo del general Yu-Hon, hermano mayor del fallecido rey Il, y actual soberano de Kouka. Es el primo de Yona y fue su amor platónico durante su juventud, hasta que un giro brusco en los sucesos, motivado por él mismo, los distanció irremediablemente.

Soo-Won pasó parte de su infancia en el castillo Hiryuu con Yona y Hak, creciendo los tres en una especie de hermandad. Soo-Won era algo así como el alma tranquila del grupo, en consonancia a los caracteres incansables de Yona y Hak. Estaba más o menos asumido que Yona se casaría con él y que Hak estaría feliz de protegerlos a ambos. No obstante, en el decimosexto cumpleaños de Yona, Soo-Won asesinó al Rey Il para posteriormente declararse Rey de Kouka. Por desgracia Yona presenció el terrible acto, lo que pareció conllevar la necesidad de silenciarla terminando con su vida. Hak consiguió rescatar a la muchacha y sacarla del castillo. En todo momento, Soo-Won declaró que el rey Il había asesinado a su padre, el general Yu-Hon, aunque no es hasta después de la marcha de Yona que vemos desarrollarse otra cara de la trama de asesinato que llevó a cabo Soo-Won.

Admito que Soo-Won es un personaje muy difícil de juzgar. Venga, ¿hay alguien a quien no le desconcierte ni un pelín? Porque yo cuando le veo actuar como una buena persona, extrañamente, me lo creo. Me creo que sea generoso, y algo despistado (o que lo fuera en algún momento), y gentil con los necesitados. Pero cuando es manipulador y siniestramente inteligente también me lo creo. Lo que está claro es que es alguien capaz de mover los hilos necesarios para conseguir el apoyo de las personas más influyentes de Kouka. Lo ves ser un crío patoso del que los generales se rían y al que riñen, y después poner a toda una Tribu a su servicio engatusando a su líder bélico. Lo dicho: no sé qué pensar de él. No puedo decir que sea un personaje que me caiga mal porque no es así. Sencillamente me desconcierta. Y eso solo hace que me muera por saber más de él. Algo que, por desgracia, aún no se ha conseguido en el manga. 

En especial me confunde su relación con Yona y Hak. Está claro que los quiere, o los ha querido, a ambos durante mucho tiempo. Que son personas importantes para él como él lo es para ellos, pero al mismo tiempo no titubeó al ordenar matarlos o enfrentarse a Hak con claras y letales intenciones. Pero después pareció muy triste cuando recibió la falsa noticia de que Yona y Hak habían muerto. Pareció sentir su pérdida, pero también que su sentido del deber se antepone a sus propios sentimientos. ¿Qué hay realmente tras la muerte de su padre? ¿Qué podría convertir al bueno de Soo-Won en una asesino? ¿Justicia? ¿El deseo de un país próspero? NO-LO-SÉ. Aidyisdusjdyguabd...


Yoon


Reconozco que lo de Yoon no me lo esperaba. Nop. Ha sido la gran sorpresa para mí: un personaje en el que apenas reparé en el póster y el opening (en el que sale un micro-segundo, por cierto) y que se ha convertido prácticamente en el acto en mi personaje favorito de esta historia. 

Yoon es la primera adición del grupo de Yona y Hak, y el único que realmente se une sin tener una atadura real con la causa. Yoon era el ayudante/niñera de Ik-Soo, el monje, con el que vive desde que lo encontró siendo un huérfano que robaba para poder comer. Dado que Ik-Soo era muy patoso, Yoon aprendió desde muy joven a cocinar, coser, cazar y sobretodo a usar las artes curativas. Siempre demostró ser un chico inteligente y curioso, de mente ágil y analítica, pero se había resignado a no conocer nada del mundo más allá de los pocos libros que pudiera ir reuniendo poco a poco. Cuando Yona decidió ir a buscar a los Dragones, fue el propio Ik-Soo el que impulsó a Yoon a que se marchara con ella para que viera el mundo y aprendiera como él deseaba, aunque tuviera que dejarle a él atrás. 

Yoon demuestra muy pronto ser increíblemente útil en el viaje. Aunque él no lucha, ya que se autodeclara pacifista, su habilidad en todo lo demás le convierte en una pieza clave del éxito de la misión. Él cocina y consigue alimentos cuando Hak y Yona solo malvivían; él cura las heridas después de los enfrentamientos. Él lee los mapas y adivina con precisión dónde pueden estar los lugares donde deben buscar a los Dragones. Llega un punto en el que dices "sin él, no llegaban aquí ni de broma". De hecho, llevo tiempo dándole vueltas a algo: cuando Ik-Soo le dijo a Yoon que se marchara, dejó caer que "no eres solo un chico que deba quedarse en este lugar. Ve y ayuda a la princesa". ¿Habrá visto Ik-Soo algo en el futuro sobre el papel de Yoon en los acontecimientos?

El carácter de Yoon es una delicia respecto a naturalidad. Para empezar resulta cómico que precisamente el más joven del grupo (solo 15 años) sea el que actúa con más madurez, aunque por supuesto eso no le salva de sus momentos cómicos. Algo soberbio (se autodenomina "un genio apuesto"), también se presenta pronto como alguien altruista que siempre se preocupa por los demás antes que por él mismo. En ocasiones ha llegado a lamentarse de ser incapaz de luchar o proteger a sus amigos como Hak o los tres primeros Dragones, pero su capacidad de sacrificio (como demostró en la misión que les llevó a él y a Yona a infiltrarse en un grupo de mujeres que iban a ser vendidas como esclavas) y su esmero en los pequeños detalles en los que habitualmente nadie repara le ganan un puesto de honor como "el segundo" del grupo al lado de Yona. 

Otra cosa encomiable de Yoon es su dinámica con el grupo. Su interacción con todos y cada uno de los protagonistas es única, lógica y a la vez espontánea. En especial debo destacar su amistad con Yona. Adorable, no hay más definición. La autora deja entrever en el 70.5 del manga (entre varias cosas, una historieta corta dedicada a Yoon) que algunos en el grupo obvian que Yoon sea un chico (Yona no tiene en cuenta su género, y Ki-Ja directamente lo ve como otra chica). Yoon se permite ser sensible e incluso llorica frente a Yona, pero a la vez ella es la razón por la que alguien tan racional llegue a hacer lo que sea por protegerla. De verdad que me tienen ENAMORADA la relación de amistad entre estos dos (puede que incluso más que el tema romántico entre Yona y Hak). La prueba palpable de que la simple amistad puede existir entre chicos y chicas.

Por cierto... es el personaje que más difícil me ha sido de emparejar en la vida. Normalmente a mis personajes favoritos no me cuesta nada "shippearlos" con alguien (a menudo con más de uno), pero con Yoon es imposible. Sencillamente no veo que él tenga interés en el amor y por ende no lo imagino románticamente envuelto con nadie. Al principio, muy fugazmente, pensé que se llevaba un rollo raro con Ik-Soo, pero poco a poco he descartado esa idea (más bien tenían una relación paterno-filial donde Yoon era algo así como el responsable de los dos [?]), pero desde ahí... 

Con Yona ha habido algunas cosas que digo bueeeeeeeeeeeno, podría ser (como el capítulo 70.5 del manga, donde él se escandaliza y sonroja cuando se despierta y Yona se ha abrazado a él mientras dormían), pero en realidad Yona no lo considera un chico y veo que se relacionan más como lo harían dos hermanos. Tal vez porque Yoon es aún muy joven, no lo sé. He visto por las redes que la gente lo shippea con Zeno, no sé muy bien por qué, pero yo no lo veo (no más que con los otros tres Dragones, al menos). Yo que sé. Estoy muy confundida respecto a esto.  

Podría pasarme horas escribiendo sobre este chico (creo que ya ha quedado claro). 


Ki-Ja (Dragón Blanco)


Ki-Ja es el primer descendiente de los Dragones al que Yona encuentra, oculto en la Aldea del Dragón Blanco en las montañas de Kouka. El poder del Dragón Blanco reside en su brazo derecho, con una mano anormalmente grande y recubierta de escamas blancas. En ése brazo tiene una fuerza descomunal, transformándolo en un arma terrible.

Ki-Ja, a sus veinte años, no ha salido jamás de la Aldea del Dragón Blanco, donde sus congéneres lo adoran y protegen con sus vidas. El anterior Dragón Blanco fue su propio padre, que murió cuando él era pequeño. Se podría decir que Ki-Ja es, de todos los Dragones, el que siente la lealtad más fuerte hacia el rey Hiryuu, ya que esperaba fervientemente la llegada de éste y reconoció en el acto su señal en el cabello rojo de Yona. También es el que profesa a la princesa una fidelidad más irracional, en el sentido de que confía más que nadie en la atadura entre los Dragones y Hiryuu y antepone dicho deber a sus propios deseos (aunque él no se lo plantee seriamente hasta que se encuentra con Jae-Ha, su antítesis respecto a este tema). Se marcha con mucho entusiasmo de la Aldea del Dragón Blanco, en parte también para huir de la insistencia de su haya de que, a los 20 años, ya debería tener varias esposas (y que no tiene ni una, por cierto). 

Debo decir de Ki-Ja que me parece uno de los personajes más cómicos del elenco. Cuando lo vi aparecer en el 10º episodio me pareció grandilocuente y ceremonioso... pero enseguida se desvela como un chico con una personalidad algo inestable. Para empezar, haber vivido toda la vida entre mimos le convertido en una especie de "señorito" que se horroriza cuando descubre que Yona y los suyos duermen al raso y comen los frutos y raíces que encuentran en el monte. Y cuando te enteras de que tiene pánico de los insectos... L-O-L. Es mortal el momento en el que bichos varios empiezan a subirle por las piernas y Hak lo utiliza a menudo para mofarse de él xD. Su entusiasmo a veces resulta también infantil, como si fuera un niño que no piensa demasiado en las consecuencias de sus palabras y actos.

Dejando de lado esto, Ki-Ja es más de lo que aparenta ser. Tomándose tan a pecho su deber como heredero del Dragón Blanco, siente desde el instante 0 que debe competir con Hak por la protección de Yona. De hecho le instó a marcharse, alegando que estando él allí Yona no necesitaba a Hak (afortunadamente, la princesa interfirió para dejar en claro que los necesitaba a ambos). En las primeras semanas de su anexión al grupo, utilizaban su atadura con los otros Dragones para viajar a lo largo y ancho de Kouka y saber si había o no un Dragón en cada sitio. Ki-Ja siente una imperiosa necesidad de resultar útil, y se sintió muy frustrado cuando su intuición no podía ser de gran ayuda. Por suerte sus habilidades en el combate le convierten en una pieza indispensable para la supervivencia del grupo.

Lo dicho: me sorprendió que me gustara. Normalmente este tipo de personajes no me llaman la atención, pero a Ki-Ja no puedes evitar quererle. 

Dafuq...


Shin-Ah (Dragón Azul)


Shin-Ah (o "Seiryuu") es el descendiente del Dragón Azul y su poder reside a sus ojos, que tienen aspecto reptiliano con pupilas verticales. A quien mira se ve atrapado en una fuerte parálisis, aunque actúa en doble sentido y él también se queda paralizado acto seguido. 

El pasado de Shin-Ah es posiblemente el más triste (de los narrados en el anime, al menos). La Aldea del Dragón Azul, a diferencia de la del Dragón Blanco, considera que la herencia de los Dragones es una maldición. Nada más nacer, al Dragón Azul le pusieron una máscara que no podría quitarse para cubrir sus ojos. Su madre se suicidó al saber que su hijo era el siguiente Dragón Azul. Lo encomendaron a Ao, el que fuera el anterior Dragón Azul, que lo trataba con dureza y una pizca de resentimiento. Siendo un poco más mayor, el muchacho intentó acercarse a un grupo de niños en busca de compañía, pero éstos huyeron despavoridos. Ao le recriminó el intento de hacer amigos, recalcándole que siempre estaría solo.

A pesar de ello, Ao le hacía compañía y le instruyó en el uso de la espada, ya que la maldición de sus ojos era demasiado peligrosa para él mismo como para usarla. El propio Ao se estaba quedando ciego después de perder los poderes del Dragón, y murió finalmente un día después de proteger la aldea. Ese mismo día, le pidió perdón al niño por haberlo tratado mal, quedando patente que había sido su único amigo. También ése día el niño había recogido unos cascabeles que se ató a la máscara, de modo que aún ciego Ao podría encontrarle en la oscuridad. Por desgracia, todo fue en vano. 


Varios años después, Seiryuu vive solo en el fondo de un entramado de túneles bajo la aldea, con la simple compañía de la ardilla Ao (en honor a su antecesor). Yona aparecería en la aldea buscando al Dragón Azul. Éste la ayudaría en los túneles de la montaña cuando un aldeano intentó atacarla. Posteriormente, cuando Ki-Ja determinó que ése chico era el Dragón Azul, Yona fue a pedirle su ayuda, aunque inicialmente Seiryuu se negó. Yona y Yoon fueron atrapados por un derrumbe, y Seiryuu apareció para ayudar a cavar un túnel como todos los demás. Uno de los aldeanos entró en pánico por su presencia y le quitó la máscara de un manotazo. Yona quedó obnubilada cuando vio los ojos del Dragón Azul, diciendo que "eran tan hermosos que quitaban el aliento". Tras salir de la cueva, el Dragón Azul se unió al grupo de Yona. Esa noche estaba contemplando la luna y las estrellas (se supone que no ha estado en el exterior por años) y al encontrarle Yona le puso el nombre de "Shin-Ah" ("luz de luna" en la lengua de Kouka).

Shin-Ah es bastante tímido y antisocial, no intercambiando más que unas pocas palabras con sus compañeros y actuando de formas extrañas ante las situaciones más comunes. Tampoco tiene sentido alguno de la cercanía o las actitudes sociales, como cuando llamó a Yona directamente por su nombre (no "princesa" o "Yona-chan"). No obstante es una fuerza a tener en cuenta, ya que su habilidad con la espada, rápida y certera, es inigualable. Así mismo el poder de sus ojos le permite ver a largas distancias, siendo un vigía perfecto. Siempre lleva la máscara puesta, y se pone muy nervioso si intentan quitársela (algo que sucede cuando se encuentra con la capitana Gi-Gan). En el manga su necesidad de llevar cubiertos los ojos desencadena uno de los sucesos de la trama que aún ahora me parecen más peliagudos. Lo que está claro es que la presencia de Shin-Ah en el grupo es una especie de constante que, si bien en silencio, es inamovible. Él se limita a seguir a Yona y a su grupo por lealtad y amistad, y eso parece ser suficiente para los demás, que jamás lo presionan más allá de su límite.  Espero cosas muy grandes de este personaje (si se puede pedir más ¿?).


<3


Jae-Ha (Dragón Verde)


Jae-Ha es el poseedor de la pierna derecha del Dragón Verde, que le proporciona una fuerza desmedida en dicha extremidad y le permite saltar tan alto que casi podría decirse que "vuela" (se le conoce como El Pirata Volador). 

En el anime no se dice demasiado sobre el pasado de Jae-Ha; solo comenta de pasada que lo tenían encadenado en la Aldea del Dragón Verde. Literalmente, lo tenían encadenado desde niño con la imposibilidad de moverse o salir de su prisión (detalles en el manga), pero consiguió escapar y acabó encontrándose, siendo solo un muchacho, con la capitana Gi-Gan. Ella le ofreció la posibilidad de unirse a su tripulación (que "la conquistara"), ya que estaba buscando luchadores entregados para combatir la corrupción en la ciudad portuaria de Awa. Jae-Ha resultó ser la baza que Gi-Gan había estado buscando: con su capacidad para saltar y la fuerza de su pie derecho, se convirtió en un guerrero terrible tanto a largas como a cortas distancias. Además se hizo diestro en el uso de cuchillos y pequeños proyectiles, siendo más efectivo en el combate que decenas de sus enemigos. 

Jae-Ha es sabedor de la leyenda de los Dragones y de que algún día su "amo" aparecerá, pero a diferencia de Ki-Ja o aún Shin-Ah, no desea saber nada de los Dragones o de un deber que no le atañe. Tal vez su infancia de cautividad le produjo una desmedida ansia de libertad, pero como él mismo dice "huye de ése destino". El caso es que cuando siente que los dragones Blanco y Azul han aparecido en Awa, intenta esquivarlos para que no detecten su presencia. No obstante conoce por su lado a Hak, a quien intenta captar como pirata para la tripulación de Gi-Gan, y una cosa lleva a la otra. Que por cierto... Yo creía que estaba ligando con Hak al principio (como para no pensarlo, oiga). Al conocer a Yona siente la misma atracción innata que los otros, pero intenta ignorar definitivamente esa sensación. Por desgracia (o suerte) para él, Yona es tozuda y se empeña en ganárselo aunque sea de manera no tan directa.

Jae-Ha es bastante arrogante, narcisista y un conquistador nato que se dedica a ligar con cuanta chica encuentra en su camino (y a veces con algunos chicos, o al menos eso quiere aparentar). Sin ir más lejos, en su segundo encuentro se lleva a Hak a algo parecido a un burdel (sin comentarios...). Sin embargo Jae-Ha está lejos de ser superficial o incluso egoísta. Es harto evidente que siente un afecto más que genuino por sus compañeros y su capitana, y además enseguida salta a proteger a la gente más necesitada de Awa aún cuando pueda ponerse en riesgo a sí mismo (aunque confía bastante en sus propias habilidades, para qué nos vamos a engañar).

Debo decir algo de Jae-Ha, y es que es el único personaje junto a Hak donde realmente puedo ver que siente algún tipo de sentimiento romántico por Yona. Me da esa sensación, no sé por qué, sobretodo por conversaciones ambiguas que mantiene con Hak en plan "si tú no la quieres, iré a por ella". No obstante, me da la sensación de que no interferirá ante ambos, tal vez porque sabe que no puede competir con Hak o sencillamente porque sabe que él es la mejor opción para Yona. Y eso me tranquiliza y a la vez me da pena por él :S.


Zeno (Dragón Amarillo)


Zeno, el último de los Dragones, muy desgraciadamente solo ha tenido la oportunidad de aparecer en el último episodio... aunque uno/a ya intuye que tiene mucho que contar y aportar. 

Se presenta de susto, sin que hayan tenido que ir a buscarlo (de hecho Ki-Ja dice que sentía muy cerca al Dragón Amarillo pero que no imaginaba que TANTO). Él mismo dice que, en su opinión, su poder es que "su cuerpo es muy resistente"... aunque después Hak le da un puñetazo y el pobre rubiales queda bastante perjudicado. Por desgracia (me repito, lo sé) hay que indagar en el manga para descubrir cuál es exactamente su habilidad especial (no voy a hablar mucho de él aquí. El manga está por la red y en el vídeo que hice hay una parte de spoilers donde dije cómo me siento sobre esto...). Con un solo episodio de anime te queda claro, por cómo habla en sus extraños momentos de seriedad, que es más de lo que aparenta y sabe más de lo que dice. También te dejan con la miel en los labios al darte cuenta de que es algo "distinto" a los otros Dragones, ya que como bien dice no ha sentido ése poder de atracción hacia Yona como el resto. Aún así, es el primero en decir claramente que Yona es la reencarnación de Hiryuu (aunque es algo que se intuye desde el principio, vamos...). 


Zeno mola. MUCHO. No digo más. El que quiera más, que busque el manga.

Hay otros personajes que me encantaron, como el dúo Tae-Woo y Han-Dae (los dos amigos de la Tribu del Viento); Mundok, el abuelo adoptivo de Hak, e incluso Guntae, el General de la Tierra (no sé por qué, me gustó en cuanto apareció en pantalla. A mucha gente no le gustaron los dos episodios que tuvieron lugar en la Tribu de la Tierra pero a mí, tal vez por mi simpatía por este personaje, me entusiasmaron). Debo recalcar el papel de Gi-Gan, la líder de los piratas, una mujer de carácter en un universo donde, por el momento, los papeles relevantes de las féminas más allá de Yona brillan por su ausencia (tendremos que esperar al manga para que haya otra chica realmente importante en la historia, y esa será Lili, la heredera de la Tribu del Agua).


OPINIÓN PERSONAL

Muchos la han comparado con Fushigi Yuugi, que es mi manga predilecto, y también con Fruits Basket. Creo que sí tiene ciertos elementos que me recuerdan a éstas... pero a la vez tiene un alma propia que la hace totalmente distinta.

No hay giros argumentales que te dejen boquiabierto (no al menos en lo narrado hasta ahora en el anime), pero aún así logra mantener el interés sin esforzarse demasiado. Es verdad que no tiene nada especialmente novedoso que no hayamos visto nunca, pero hay algo imposible de describir en lo rápido que te ganan los personajes. Tal vez el sentido del humor, fresco y sorprendentemente natural. Los gags me recuerdan a algunos animes de los 90s, donde el sentido del humor no era tan forzado y producía sonrisas genuinas.

lel 2... Puto Shin-Ah

Puede que la gente lo clasifique como shoujo (acertadamente), pero desde luego no me parece romance fantástico, más bien fantasía épica con un poco de romance. El amor está servido y es una especie de constante a lo largo de la trama, pero no es el hilo central. El eje de la historia es la guerra interna de Kouka y el desarrollo de la leyenda del Rey Hiryuu y los Dragones. Punto. 

La animación no es excepcional pero sí me ha parecido superior a la media en este tipo de animes (tampoco es que sea una experta, vamos...). Las escenas de lucha en especial están MUY bien animadas. Recuerdo los episodios 5 y 6, con lo que sucede cuando Hak se enfrenta a la Tribu del Fuego en las montañas, y la fluidez de los movimientos me saltó inmediatamente a la vista.

La banda sonora no tiene desperdicio, y es en mi opinión uno de los puntos más fuertes. A destacar el tema central (a su vez el 1º opening) que suena en los momentos más épicos de la protagonista. Admito que el segundo Opening me vuelve loca, algo que choca un poco con el hecho de que a mucha gente no le gustó (que no pegaba con una historia de época y eso). Lo tengo en el móvil y lo repito hasta la saciedad, no digo más. También el segundo Ending, con esa parte final donde el grupo principal aparece dibujado a tinta, me tiene ganada. 

Lo dicho: no es el anime del siglo, pero sí recuerda a grandes clásicos y no es excesivo en ningún aspecto (ni romance, ni drama ni comedia), poniendo la justa ración de todo para hacerlo un producto de lo más atractivo. Una buena opción para pasar un muy buen rato, echarte unas risas y perderte en un mundo que recuerda al oriente medieval, pero con dragones y poderes extraordinarios.

Y princesas con ojos y cabellos de fuego, también.



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BONUS

Como ya he comentado, en este último año me ha entrado un venazo muy fuerte con el juego League of Legends. A mi mente random no se le ocurrió otra cosa que crear un equipo estándar con los personajes de Akatsuki no Yona...


Pobre Zeno, como me paso. Por supuesto, hablando solo del anime. En el manga, Zeno más bien sería un tanque support (?). 

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